¡Hola a todos de nuevo!
Voy a empezar con un par de entradas de mega resumen del verano y lo que he hecho hasta ahora, para ponerme ya con entradas algo más interesantes, de curiosidades que he ido acumulando pero al final no he escrito. Esta entrada es del viaje con Amaia y, esta vez si, ¡voy a poner un montón de fotos! Espero que las disfrutéis, ¡jajaja!
Lo dejé a finales de julio,

con la llegada de Amaia a Nagoya. Ese fin de semana lo primero que hice fue llevarla de fiesta con Kotone y demás gente a ID, para rememorar nuestros tiempos en Alemania. A ver si así matábamos el yet lag… Aunque no funcionó =P.
El sábado fuimos a una fiesta en la playa organizada por unas discotecas de Nagoya, lo que significa:

DJs y gogós sumados a un montón de japoneses y extranjeros de las cercanías. Vamos, la típica fiesta de playa, versión japonesa.
Como podéis ver en las fotos, hubo un puñado de gente, pero aun sí, nos encontramos de pura casualidad con otros españoles que estaban en Mie y que también se habían apuntado a la fiesta.
El domingo nos fuimos al festival de Toyota, que es muy conocido por su hora y media de fuegos artificiales. No nos dio tiempo a ver los puestitos y, además, como suele pasar con todo lo que es famoso

(y más aún aquí en Japón), estaba a rebosar de gente, imposible andar, y menos aún si llevas puesto un yukata.
De todos modos, comimos, bebimos, y disfrutamos de los fuegos. Cuando terminaron, nuestro primer impulso fue salir un poco antes del final para llegar al tren, pero a mitad de la escapada, nos dimos cuenta que todo el mundo estaba haciendo eso, y nos paramos a pensar: si estuviéramos en España, ésa hubiera sido la mejor estrategia, pero estando en Japón,

lo mejor que podíamos hacer era esperar a que todo el mundo escampara y coger el anteúltimo o el último tren, porque todo el mundo se habría marchado ya.
Así que decidido esto, nos fuimos a un izakaya, a cenar mejor y beber hasta que se nos hizo la hora. Gracias a dios, acertamos, ¡e incluso pudimos sentarnos en el viaje de vuelta!
El lunes empezamos nuestro periplo, durante el cual saltaríamos de couchsurfer en couchsurfer, menos en Osaka, que reservamos hostal para poder salir de fiesta a gusto.
La primera parada fue Kyoto.

Preciosa, evidentemente, y para rematar, nuestros anfitriones fueron de lo mejor: una casa de estudiantes muy sociables que a pesar de tener exámenes, nos hicieron hueco y pasaron tiempo con nosotras. EN la foto podeis ver a Andy, que nos acompañó a un par de templos. ¡Gracias!

Desde allí, visitamos también Nara, que no había estado antes. Menudo calor, menudo miedo con las cigarras, y vaya cantidad de templos. Los cervatillos nos dieron un poco de miedo al principio, pero tras un par de acercamientos temerosos, comprobamos que esos animales están más que amansados. Solamente se exaltan si ven/huelen comida, que ahí si que había que estar atentas… ¡Jaja! La foto es de una pagoda en Nara, que un amable señor se ofreció a hacernos.
Después de Kyoto, pasamos a Osaka,

donde nos encontramos con Kotone y nos fuimos de fiesta las dos noches que pasamos allí. Conclusión, no hicimos mucho turismo de día, pero nos lo pasamos genial y, después de los 5 días de Kioto, nos vino muy bien.

A quien no le vino tan bien fue a Kotone, que se marchó de vuelta a Nagoya con un esguince porque una occidental loca la atropelló con la bici cuando volvíamos al hostal… En las fotos podeis vernos a Amaia y a mi en el puente de Namba, y con un grupo de extranjeros que conocimos en el hostal y con los que nos fuimos de fiesta.
De Osaka, pasamos a Okayama:

nos perdimos el festival que se celebraba durante el dia (foto de una de las chicas que bailaron durante el festival) y al final fue una muy breve parada , pero debido a una muy mala experiencia con el anfitrión, nos marchamos de allí como alma que lleva el diablo.
De Okayama pasamos un día entero en tren para llegar finalmente a Hiroshima, agotadas

y con los ánimos un poco por los suelos. La anfitriona no fue demasiado sociable, pero pudimos pasar un par de días en su casa, y además de visitar la ciudad, museo de la paz incluido,

donde una niña muy simpática nos hizo una entrevista y nos regaló unas grullas de origami que había hecho ella misma (foto), pasamos por Miyajima, visita obligada. A pesar de que pedimos un par de veces que nos hicieran foto con el Tori, no conseguimos que nos hicieran una foto decente, donde se nos viera a las dos y al tori, sin que nosotras lo tapáramos...
De allí, volvimos a pasar nuestras cuantas horas para llegar a Kobe, donde nos alojamos en un piso compartido

por amigos, que nos recibieron muy bien y nos hicieron sentir en casa. Tuvimos una experiencia muy graciosa visitando el monte Rokko (Amaia disfrutando de las vistas depués de nuestra experiencia en la selva nipona) y finalmente, nombramos al Lawson (uno de los muchos supermercados 24 horas) como nuestro mejor acompañante durante el viaje.
De Kobe volvimos a Nagoya, donde volvimos a salir de fiesta, pasamos el día descansando y de allí cogimos un bus nocturno a Tokio.
En Tokio coincidimos con Kei

y con Noora, y visitamos los esenciales de la ciudad (en la foto podeis vernos a Kei, Amaia y a mi proyectados en el cartel de Takeshita Dori ^_^) , con dos días no podía dar mucho más de sí. Evidentemente, tanto la primera como la segunda noche salimos de fiesta, ¡Roppongi había que visitarlo!
La última noche de Amaia, estuvimos en un karaoke cantando hasta las 5 de la mañana (en la foto veis el lamanecer en Asakusa, con la Tokyo Sky Tree de fondo), y de allí, ella recogió sus cosas, y se marchó al aeropuerto, mientras Noora y yo íbamos a morir al hostal.
El viaje nos dejó destrozadas, medio enfermas, y sin un duro, y eso que recortamos todos los gastos posibles… Pero, ¡mil gracias Amaia por venir! ^_^
Yo me quedé un día más en Tokyo, con Noora, Kei y una amiga de Kei. Durante el día, decidimos pasar por Akihabara y visitar un Maid café. Fue muy gracioso, y al finak incluso nos dieron unas tarjetas de “Ama” y “Amo”, ¡jaja! No nos dejaban hacer fotos a las sirvientas, eso es sólo cuando has conseguido muchos puntos, así que os dejo un par de fotos de nosotros con las cositas monísimas que nos tomamos.
Lo dejo aquí, ¡más resumen y fotos para la próxima!